Enfrentarse a deudas tributarias puede ser una situación estresante y confusa. Sin embargo, en España, existe un mecanismo que puede ofrecer alivio a quienes no pueden cumplir con sus obligaciones fiscales en los plazos establecidos: el fraccionamiento o aplazamiento de deudas con Hacienda. Este artículo desglosa cómo funciona este proceso, los plazos involucrados y las consecuencias de no cumplir con los pagos, brindando así una guía completa para aquellos que buscan manejar sus deudas tributarias de manera efectiva.
Opciones para la gestión de deudas con Hacienda
La legislación española ofrece diversas opciones para ayudar a los deudores a gestionar sus obligaciones fiscales. Aunque las deudas tributarias no se pueden cancelar de la misma forma que otros tipos de deudas, como préstamos personales, existen mecanismos que facilitan su pago.
En términos generales, es posible cancelar hasta 10.000 euros mediante un proceso específico, mientras que el resto de la deuda puede ser objeto de un aplazamiento. Esta opción permite gestionar de manera más efectiva la carga fiscal, facilitando el cumplimiento de las obligaciones tributarias.
Si deseas un análisis personalizado sobre cómo manejar tus deudas con Hacienda, no dudes en contactar con Reclamalia abogados. Te ofreceremos información y asesoría adaptadas a tu situación financiera.
Cuándo se puede solicitar el fraccionamiento de una deuda con Hacienda
El fraccionamiento de una deuda tributaria puede solicitarse en dos momentos clave:
Durante el período voluntario de pago
Este es el plazo habitual que se ofrece para el pago de deudas y se extiende por:
- 20 días hábiles a partir de la notificación de la liquidación.
- Hasta el día 20 del mes siguiente, en el caso de autoliquidaciones como el IVA o el IRPF.
Solicitar el fraccionamiento en esta fase es ventajoso, ya que no se generan recargos ni intereses de demora. Esto permite a los deudores cumplir con sus obligaciones fiscales sin las penalizaciones que pueden surgir si no se actúa a tiempo.
Durante el período ejecutivo de pago
Si no se realiza el pago durante el período voluntario, Hacienda inicia el procedimiento ejecutivo, lo que implica recargos que pueden llegar hasta el 20%. A pesar de esta situación, todavía es posible solicitar el fraccionamiento, siempre que no haya una notificación de providencia de apremio con embargo.
¿Cuánto tiempo tarda Hacienda en conceder el fraccionamiento?
El tiempo que tarda Hacienda en resolver una solicitud de fraccionamiento varía según el monto de la deuda:
Para deudas hasta 50.000 euros (sin garantías)
- No se requiere aval ni documentación adicional.
- La solicitud puede realizarse a través de la Sede Electrónica con certificado digital o Cl@ve.
- El plazo medio de resolución es de 1 a 2 meses.
- Durante este tiempo, la deuda se encuentra en suspenso, y no se inician embargos.
Para deudas superiores a 50.000 euros (con garantías)
- Hacienda exigirá una garantía, que puede ser un aval bancario, un seguro de caución o una hipoteca inmobiliaria.
- Es necesario demostrar la capacidad de pago y aportar documentación que respalde la situación económica del solicitante.
- El plazo de resolución se extiende a 3-6 meses e incluso más si hay problemas con la garantía.
Documentación necesaria para solicitar el fraccionamiento
La cantidad de documentación necesaria para solicitar el fraccionamiento de una deuda con Hacienda depende de varios factores, incluidos el importe total de la deuda y si se trata de una persona física o jurídica.
A. Si la deuda es inferior o igual a 50.000 euros (sin garantías)
El procedimiento aquí es más sencillo:
- No es necesario presentar documentación económica.
- Completa el formulario de solicitud en la Sede Electrónica.
- En el formulario, especifica:
- Número de plazos (normalmente mensuales).
- Fecha del primer vencimiento (máximo 30 días después de la solicitud).
- Número de cuenta bancaria para la domiciliación de pagos.
Este proceso es automatizado, por lo que si no hay incidencias, la resolución suele ser rápida y favorable.
Importante: Si tienes varias deudas con Hacienda, se suman para calcular el límite de 50.000 euros. Si el total supera este monto, se exigirá documentación y garantías adicionales.
B. Si la deuda supera los 50.000 euros (con garantías)
El procedimiento se vuelve más riguroso y necesitarás presentar:
Documentación general
- Formulario de solicitud que debe incluir:
- Motivos para solicitar el fraccionamiento.
- Número de plazos y cuantía a pagar en cada uno.
- Tipo de garantía ofrecida.
- Declaración responsable sobre la veracidad de los datos.
Documentación económica
Hacienda solicitará la siguiente documentación para justificar la imposibilidad de pagar la deuda en un solo plazo:
Personas físicas:
- Declaraciones del IRPF de los últimos dos ejercicios.
- Justificantes de ingresos actuales: nómina, pensión, certificado de prestaciones por desempleo o ingresos por actividades económicas.
- Declaraciones trimestrales de IVA y pagos fraccionados del IRPF.
- Relación de bienes inmuebles y vehículos: escrituras, notas simples del Registro, informes de Tráfico.
- Gastos regulares: hipotecas, préstamos personales, pensiones alimenticias, alquiler, etc.
- Extractos bancarios de los últimos meses.
Personas jurídicas:
- Declaraciones del Impuesto de Sociedades de los dos últimos ejercicios.
- Balance y cuenta de pérdidas y ganancias actualizados.
- Libro mayor o movimientos contables recientes.
- Relación de clientes y proveedores (con saldos).
- Documentación de otras deudas contraídas (con bancos, Seguridad Social, etc.).
- Relación de activos de la empresa, incluyendo inmuebles, vehículos y maquinaria.
Documentación sobre la garantía ofrecida
Cuando la deuda supera los 50.000 euros, es necesario garantizar el pago. Para ello, deberás presentar:
- Aval bancario: un compromiso de una entidad financiera para hacerse cargo en caso de impago.
- Seguro de caución: un contrato con una aseguradora especializada.
- Hipoteca inmobiliaria: tasación del bien ofrecido, nota registral actualizada y escritura de propiedad.
Hacienda evaluará si la garantía cubre al menos el 125% de la deuda total, lo que asegura que pueda ser recuperada en caso de impago.
Efectos del fraccionamiento en el tiempo
Desde el momento en que se presenta la solicitud de fraccionamiento, la deuda se considera en suspensión, siempre que se haya efectuado correctamente. Esto implica:
- No se inician embargos sobre los bienes del deudor.
- No se incrementan los recargos por demora.
- Se mantiene la posibilidad de continuar contratando con la administración pública.
El número de plazos dependerá de la cantidad de la deuda y de la situación económica del solicitante. Algunas referencias son:
- 6 a 12 plazos para cantidades pequeñas o medianas.
- 12 a 24 plazos en casos de dificultad económica justificada.
- Hasta 36 plazos si hay documentación respaldatoria.
- Hasta 60 plazos si hay garantía real.
Los plazos suelen ser mensuales y consecutivos. Hacienda se reserva el derecho de modificar el número de plazos o la cuantía de cada uno según su valoración y criterio.
Consecuencias de no pagar un plazo
El incumplimiento en el pago de uno o varios plazos puede acarrear diversas consecuencias negativas:
- Revocación del fraccionamiento, obligando al deudor a pagar la totalidad de la deuda de inmediato.
- Inicio del procedimiento de apremio, lo que conlleva recargos e intereses adicionales por falta de pago.
- Embargo de bienes y cuentas si no se paga tras la revocación del acuerdo.
- Limitaciones para solicitar nuevos aplazamientos durante un tiempo determinado, lo que podría complicar aún más la situación financiera del deudor.
Es crucial cumplir estrictamente con el calendario de pagos establecido para evitar estos problemas. En caso de dificultades, se recomienda actuar con rapidez y asesorarse adecuadamente.
Para obtener más información sobre cómo gestionar tus deudas con Hacienda o sobre el proceso de fraccionamiento, no dudes en contactar con Reclamalia abogados. Estamos aquí para ayudarte a encontrar la mejor solución a tu situación financiera.
